Después de nuestro último diálogo, abuela
abordó la embarcación mientras yo cortaba la soga que había
servido para remolcarla. La rústica canoa se iba alejando poco a
poco, mientras ella sonriendo me tiraba un último beso.
--You good, ¿okay? Good bye honey. No worry you me. Si tengo
problemas al llegar es easy, los compro con las grabadoras que pa' eso
traigo. I buy them with the players.
No volví a mirar en su dirección. Arranqué el
motor y mantuve la vista fija sin voltearme hasta llegar a puerto. Quizás
iba algo triste ya que nunca había creído todos aquellos
cuentos de estrellas y lluvias al revés o tal vez porque temía
que se comenzara a hundir el carcomido roble que había seleccionado
para salvar a las gaviotas negras.
|