Una propuesta para emprender la travesía desde Bogotá, irrumpir en las tres cordilleras e internarse en Ecuador. Son 1.205 kilómetros plenos de naturaleza, artesanías, poblaciones indígenas, volcanes, lagunas, playas y mucha aventura. Recomendaciones de bolsillo.
Dos naciones unidas en un solo trayecto. Costumbres y tradiciones que se entrelazan en una travesía de la que fluyen lagunas mitológicas, volcanes, mercados artesanales, ciudades en las que el tedio no ha podido echar raíces y en las que la vida da envidia vivirla.
Del lado colombiano, el primer día de la conquista del sur se inicia en Bogotá para alcanzar Cali, capital de la salsa, a donde se llega luego de recorrer 477 kilómetros.
Durante este trayecto se amagalman ciudades con rostros muy particulares: Melgar -a cien kilómetros de Bogotá-, eminentemente turística; Ibagué, la más musical de las musicales; Armenia, con el aroma de café a flor de piel; y Cali, rumbera por excelencia.
En la capital del Valle conviene pernoctar la primera noche para emprender, a la mañana siguiente, un trayecto de 136 kilómetros que la unen con la ciudad religiosa del país.
Allí, en Popayán, vale la pena hacer un alto para admirar la riqueza de esta ciudad rica en arte religioso y degustar las empanadas de pipián.
Por entre montañas y paisajes dignos de postal, aparece Pasto. La capital de Nariño es una cajita de sorpresas en la que el viajero encontrará una completa muestra artesanal con productos hechos en barniz o en cuero.
En la capital de Nariño puede pernoctar para madrugarle a un recorrido que incluye la cadena volcánica que encierra a Cumbal, Chile y Azufral.
Hay que sacar tiempo para visitar la laguna de La Cocha (en donde conviene probar la trucha que preparan en todas sus formas), a solo 25 minutos de Pasto por una carretera en perfecto estado.
Claro que si prefiere tomar el camino hacia Ecuador, solo 83 kilómetros separan a Pasto de la frontera partida por el Puente Internacional de Rumichaca.
La magia de los Andes
Para ingresar al territorio ecuatoriano en calidad de turista no se requiere visa. Solo necesita pasaporte o un permiso especial que le permitirá una estadía máxima de noventa días.
Este permiso se tramita ante las autoridades de inmigración con solo presentar la cédula que lo acredite como ciudadano colombiano.
A siete kilómetros del Puente se encuentra Tulcán, capital de la Provincia de Carchi. Si usted es de los que le gusta recorrer lo más significativo de cada lugar, en esta población puede visitar la Escultura Verde, que no es otra que el cementerio en el que los cipreses dan forma a la flora y la fauna de la nación.
También es imperdonoble no echarse un baño termal. En cuestiones gastronómicas se pueden degustar el hornado (especie de lechona), los gapingachos (empanaditas rellenas de arroz y carne) y las tradicionales papas asadas con cáscara.
Partiendo de Tulcán hacia el occidente, se atraviesa la Cordillera de los Andes. A lo largo de la carretera Panamericana se observan cientos de chaquiñanes (caminos cortos) y senderos que invitan a la práctica del turismo ecológico y de investigación.
Durante el trayecto se encuentra San Gabriel declarada Patrimonio Cultural del Ecuador. Allí, una iglesia construida de acuerdo con la Ley de Indias. Desde este lugar se va a Bolívar donde acuden miles de peregrinos para visitar los santuarios del Señor de la Buena Esperanza y de la Virgen de la Paz, en una gruta natural provista de aguas termales.
Tras un descenso se llega al Valle del Chota, donde se han construido sitios de recreo y piscinas con toboganes.
Viene luego el autódromo de Yaguarcocha -o lago de sangre-, donde según la historia se libró uno de los grandes enfrentamientos de los indígenas con los incas para impedir que fueran invadidos y desalojados del lugar.
A escasos tres kilómetros de este lugar se encuentra Ibarra, capital de la Provincia de Imbabura, en donde se pueden visitar museos de arte religioso y arqueológico, así como degustar de las empanadas de morocho y toda clase de dulces (arrope de mora, nogadas, helados de paila, pan de leche y helados de crema).
Solo dos kilómetros la separan de Caranqui, evidencias arqueológicas del Palacio del Sol donde nació Atahualpa (hijo de la princesa Shiri Paccha y el inca Huayna Capac).
La vía en buen estado lleva en diez kilómetros a Otavalo, con un incomparable mercado artesanal. Allí se pueden adquirir sacos, tapetes, tapices, mochilas y maletas.
También hay infinidad de telares, sombreros de fieltro, cuero, cestos de azuro y artesanía en totoras. Todo esto se encuentra en el famoso mercado de los ponchos. No olvide probar la chicha del yamor, bebida típica de la región.
A siete kilómetros de allí la cadena lagunar sigue con San Pablo, un lago que asombra por su tamaño y amerita una parada para practicar deportes náuticos.
La colonia y las playas
Como antesala de Quito se encuentran las poblaciones de Cayambe, Guayllabamba y Calderón.
Luego sí aparece la capital ecuatoriana que conquista al viajero con su arquitectura colonial, la calma que allí se siente y la nobleza de su gente.
La ciudad amerita por lo menos dos días para recorrerla desde su centro histórico, la Catedral, el Palacio de Gobierno, el Sagrario, las iglesias de la época colonial y los museos.
A 22 kilómetros de Quito, está la Mitad del Mundo (línea ecuatorial) donde el viajero puede pararse con un pie en el hemisferio norte y otro en el hemisferio sur.
En el lugar se encuentra el Museo Etnográfico, un planetario, una maqueta del Quito antiguo y almacenes de artesanías.
Tomando la ruta del norte se alcanza la población de Esmeraldas (trayecto de seis horas) o provincia verde del Ecuador.
Desde Quito se pueden escoger dos rutas para ir a este destino: por la zona industrial atravesando la ciudad, o por la autopista del Valle de los Chillos que conduce a Santo Domingo de los Colorados (le dicen también Santodomingo de los colombianos, por la cantidad de colombianos que allí viven).
Plantaciones de palma africana y de banano son la puerta de entrada a Esmeraldas, considerada la Muzo colombiana por la cantidad de gemas con las que los indígenas adornaban su indumentaria a la llegada de los españoles.
Atrás quedó la magia de los Andes. En esta región surge la playa, el sol, los 28 grados de temperatura. De allí, rumbo a Atacames, que aparece dos horas más adelante.
Conviene visitar Playa de las Palmas en donde es posible deleitarse con los pescados y los mariscos y disfrutar de variados ritmos musicales.
A su alrededor están las playas de Ancha, Tonsupa, Castelnuovo, Atacames, Súa y Peñón del Suicida.
Cuando la marea está baja se puede ir de una a otra playa caminando entre rocas, cangrejos y pequeñas olas. Sin duda, un escenario propicio para finalizar este trayecto y entregarse de lleno al descanso total.
SI USTED VA...
Documentación
En la frontera los adultos: para ingresar al Ecuador solo es necesario presentar la cédula de ciudadanía o el pasaporte. Estadía máxima de 90 días.
Los niños con padres deben presentar la tarjeta de identidad o el registro de nacimiento.
Vehículo: para ingresar el carro al Ecuador debe sacar una tarjeta de autorización que se tramita en el consulado ecuatoriano (calle 100 #14-63, of. 601).
Presentar: tarjeta de propiedad del vehículo, pase de los conductores y pasaporte o cédula (con copias). No tiene costo y se expide de un día para otro, de lunes de a viernes de nueve de la mañana, a dos de la tarde.
Alojamiento
En Cali
Hotel Intercontinental: hab. sencilla $145.000, hab. doble $160.000
Obelisco: desde $ 85.000
Santiago de Cali: $ 85.000
Americana: $ 70.000
En Popayán
Hotel Monasterio: desde $60.000
Hotel Shanany: hab. doble $51.700
Hotel Camino Real: $52.500
En Pasto
Hotel Morasurco: $88.200, hab. doble.
Hab. Agualongo: hab. doble $75.000
Hotel Don Saúl: hab. doble $67.500
En Ibarra
Se encuentran hosterías en el camino a un promedio de US$30 a US$35
En Otavalo
Hostería Pinsaquí: hab. doble US$80, hab. sencilla US$90.
En la región se encuentran hosterías a un promedio de US$40.
En Quito
Alameda Real: hab. sencilla US$99, hab. doble US$ 113, hab. triple US$135, incluido impuesto.
Hotel Sebastián: hab. sencilla US$79, hab. doble US$ 89, hab. triple US$99
Hotel Quito: desde US$60
Hotel Oro Verde: hab. sencilla US$135, hab. doble US$155, sin impuesto.
En Esmeraldas
Hotel Club Casa Blanca: hab. doble US$200
En Esmeraldas hay hoteles de paso con tarifas promedio de US$95.
En las playas de Atacames existen cabañas con piscinas y discotecas. No hay infraestructura hotelera.
Platos típicos
En Otavalo e Ibarra: los cebiches, el hornado (especie de lechona deshuesado condimentado acompañado de papa criolla frita), mote, la guatita (arroz blanco, fríjol hecho masa y condimentado).
En Esmeraldas y Atacamanes: encocados, pescados y mariscos aderezados con coco.
Cocadas: dulces de coco rallado cocido en miel de panela, bocaditos de guayaba, ceviche, pescado o mariscos marinados en limón, aceite y especias.
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