Jueves 24 de octubre de 1996

El empresario Mas Canosa y políticos del PP organizan en Madrid un 'lobby' anti-castrista

JOSÉ MIGUEL LARRAYA, Madrid
La oposición cubana, con la poderosa Fundación Nacional Cubano-Americana del empresario Jorge Mas Canosa, y el apoyo de empresarios, intelectuales y políticos de la derecha española, ha constituido en Madrid la Fundación Hispano Cubana, que nace con la vocación de ser un lobby anti-castrista y de articular políticas en favor de una transición democrática en la isla. «Queremos ser interlocutores del Gobierno y canalizar la lucha por los derechos humanos en la isla», afirma el liberal Carlos Alberto Montaner, líder de la oposición cubana que reside en España.


Abel Matutes, a la izquierda, y Jorge Mas Canosa,
en julio pasado (Efe).
La fundación, que se presentará en la Casa de América en Madrid el 14 de noviembre, está impulsada, por parte española, por Guillermo Gortázar, uno de los diputados del PP que más activamente se ha ocupado de los asuntos cubanos, que ocupará la secretaría general de la Fundación. En la presidencia estará Alberto Recarte, economista, autor de un conocido texto sobre la economía cubana y asesor de los Gobiernos de UCD, cargo en el que coincidió con el actual embajador en Cuba, José Coderch, que también fue asesor en el palacio de La Moncloa.

El diplomático José Antonio San Gil, actualmente destinado en Francia y que dimitió en 1994 como embajador en Cuba en desacuerdo con la política del Gobierno socialista; el diputado europeo del PP José Salafranca y el ex presidente del PP catalán Aleix Vidal Quadras también figuran en el patronato de la fundación. Entre los empresarios españoles que han dado su apoyo están, entre otros, Juan Abelló, presidente de Airtel, y Alberto Alcocer. Entre los intelectuales destaca Mario Vargas Llosa.

Por parte cubana forma parte del patronato Jorge Mas Canosa, empresario establecido en Miami y el político cubano con más influencia en Washington. Mas Canosa asegura que su fundación agrupa a más de 200.000 cubanos en el exilio, y ha mantenido hasta ahora una posición distante respecto a la Plataforma Democrática Cubana, formada por liberales, democristianos, socialdemócratas, grupos pro derechos humanos y religiosos, y que defiende una actitud más dialogante respecto al régimen de Fidel Castro. Sin embargo, ahora ambas organizaciones coincidirán en la Fundación Hispano Cubana creada en Madrid.

Mas Canosa desembarcó recientemente en la economía española con la compra de la empresa de telecomunicaciones Sintel, filial de Telefónica, adquisición que estuvo rodeada de una cierta polémica al asegurar los sindicatos que había habido un trato de favor. El pasado verano, Mas Canosa fue recibido por el ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, y asistió como invitado al congreso del PP. Otros miembros de la oposición cubana que figuran en la fundación son Carlos Alberto Montaner, presidente de la Unión Liberal Cubana, así como los disidentes residentes en Cuba Gustavo Arcos, Elizardo Sánchez y Oswaldo Payá.

Guillermo Gortázar, secretario general de la fundación, aseguró a este diario que ésta se financiará exclusivamente con las aportaciones de los patronos y de los amigos de la fundación, para lo que ha creado una figura -Amigo de la Fundación Hispano Cubana- a la que pueden pertenecer tanto personas físicas como empresas y entidades. En el caso de los primeros, la cuota mínima anual es de 10.000 pesetas, y en el caso de las segundos, de 100.000. La fundación, además, aspira a recoger las numerosas ayudas e iniciativas de asistencia que existen en España.

Las relaciones entre Madrid y La Habana se enfriaron tras la formación del Gobierno de José María Aznar, que no ha ocultado su deseo de marcar distancias respecto a la política de Felipe González con Cuba. Aznar y Castro no se conocen pero, según fuentes diplomáticas españolas, es más que probable que se reúnan en la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará en noviembre en Santiago de Chile.

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