Sábado 21 de septiembre de 1996

Partidarios de Vidal-Quadras plantean a Pujol seis preguntas muy críticas con CiU

JAVIER CASQUEIRO, Madrid
La crisis del PP catalán sigue supurando. Partidarios de su actual presidente en Cataluña, Aleix Vidal-Quadras, han planteado en el Parlamento autonómico seis preguntas tan críticas sobre declaraciones de miembros de CiU que se saltan la nueva estrategia de diálogo marcada por la dirección nacional. Justo en un momento delicado para el Gobierno de José María Aznar, en plena negociación sobre los Presupuestos. Dos diputados autonómicos del PP registraron esas iniciativas sin conocimiento de su portavoz, Josep Curto.


Pujol y Vidal-Quadras, el 9
de marzo (C. Rivas).
La herida causada en el Partido Popular de Cataluña tras la retirada de confianza de la cúpula del partido a su actual presidente no se ha cerrado con la proclamación de Alberto Fernández como el candidato con más respaldo para suceder a Vidal-Quadras.

Dos diputados autonómicos del Partido Popular, seguidores de las tesis críticas de Vidal- Quadras hacia el nacionalismo de CiU, han tramitado por su cuenta esta pasada semana seis preguntas al Consell Executiu de la Generalitat para su contestación oral en pleno cuyo contenido es todo menos conciliador.

El diputado Julio Ariza se hace eco de unas manifestaciones del secretario general de la Consellería de Presidencia de la Generalitat, Joaquín Triadú, mano derecha del consejero Xavier Trias, en las que reclamó: «El objetivo es llegar al final a la autodeterminación. El 50% de los catalanes que se sienten tan españoles como catalanes tienen que inclinarse por la catalanidad. La bigamia patriótica es negativa para nosotros».

Ariza interroga al Gobierno catalán -que aún no ha decidido cuando ni quién contestará- sobre si su consejero y Pujol respaldan esas declaraciones y sobre qué métodos utilizarán para decantar totalmente por la catalanidad a los que se sientan mitad catalanes y mitad españoles.

El parlamentario Josep Maria Francàs se remite a unas manifestaciones del líder de Unió Democràtica de Cataluña, Josep Antoni Duran i Lleida, en las que éste señaló: «Ni por lengua, ni por cultura, ni por costumbre, ni por historia ni por derecho podemos hablar de España como una nación».

Francàs pregunta si coincide la política impulsada por la Generalitat, su Consell y su presidente con estas ideas y requiere las medidas que se adoptarán para compatibilizar esa ideología con el artículo 2 de la Constitución.

Ariza defendió la filosofía de estas iniciativas porque entiende que el PP debe tener «personalidad propia» a pesar del pacto nacional de gobernabilidad suscrito con CiU. Reconoció, eso sí, su «inoportunidad».

El portavoz parlamentario del PP, Josep Curto, admitió que los diputados habían registrado las preguntas -únicas iniciativas que se tramitan personalmente- sin su conocimiento y sin su respaldo posterior. Curto añadió que mostró al presidente del grupo, Aleix Vidal-Quadras, su rechazo a esas preguntas porque «no se corresponden con una oposición ni dura ni blanda de una gestión; es tocar las narices por tocarlas». Vidal-Quadras ratificó el derecho de los diputados a formular ese tipo de iniciativas.

La dirección nacional del Partido Popular ha tenido conocimiento de esta conflictiva iniciativa y no ha tomado ninguna decisión al respecto.

© Copyright DIARIO EL PAIS, S.A. - Miguel Yuste 40, 28037 Madrid - digital@elpais.es


Volver al comienzo

Volver