Lea esto, por favor

PATXO UNZUETA

El País Vasco que visita Aznar es plural. Por el origen de sus habitantes, por las lenguas que hablan, por las ideas con que se identifican y las creencias que los mueven. Es, por otra parte, una sociedad industrial en declive, con graves problemas de cohesión social, agravados por la persistencia de la violencia.

Según el censo de 1991, seis de cada diez habitantes de la comunidad autónoma habían nacido fuera de ella o eran hijos de inmigrantes y dos tercios de la población contaba entre sus antepasados inmediatos con un abuelo foráneo como mínimo. En el parlamento vasco se sientan 7 formaciones políticas (frente a 5 en Cataluña y 3 en Galicia, por ejemplo). En las últimas elecciones, las fuerzas nacionalistas que lograron representación parlamentaria (PNV, HB y EA) recogieron el 45,5% de los votos, y las no nacionalistas (PSOE, PP e IU) el 51,2%. En las elecciones autonómicas, sin embargo, los nacionalistas han sido siempre mayoritarios (en las de 1994, con el 56,4%), aunque en ellas la participación suele ser bastante menor que en las generales. Ese mismo porcentaje (56%) -con una aportación de HB del 16%- es la media de los nacionalistas en el conjunto de elecciones autonómicas y generales celebradas desde 1977.

Entre el 26% y el 32% de los vascos -según la serie de encuestas del CIS sobre autoidentificación nacional- se consideran a sí mismos «sólo vascos» y entre el 5% y el 10% «sólo españoles», mientras que una amplia mayoría, en torno al 60%, considera compatibles ambas identidades: el 10%, "más español que vasco", el 20% "más vasco que español" y el 30% «tan vasco como español». Son partidarios de la independencia entre un cuarto y un tercio de los vascos -el 27% en promedio- pero si la alternativa se plantea entre autonomía y separación, el 70% opta por la primera, el 20% por la independencia y el resto no se pronuncia. El 48% se dice partidario de la autodeterminación en general, pero sólo el 19,5% se muestra personalmente favorable a ejercer ese derecho en un sentido independentista.

En 1991 hablaba euskera el 26,7% de los ciudadanos de Euskadi (diez años antes, el 21,5%), de los que era capaces de escribir en esa lengua el 60%, es decir el 14,4% del total de la población. En el curso 1994-95 los alumnos matriculados en el modelo de enseñanza en castellano (con el euskera como asignatura) eran 212.000, los matriculados en el modelo de enseñanza bilingüe, 71.000, y los que estudiaban todo en euskera, 112.000. El único diario en lengua vasca, Egunkaria, es leído por unas 20.000 personas. Los dos diarios no nacionalistas editados en Euskadi (Correo y Diario Vasco) cuentan con 950.000 lectores, tres veces y media la suma de los de signo nacionalista (Deia y Egin). El 13% de los vascos tiene estudios universitarios: proporción superior a la media española (9%) y también a la de Francia (7%) o Alemania (10%). Unos 62.000 vascos trabajan como voluntarios en las 650 organizaciones humanitarias censadas en la comunidad: el mayor número de cualquier región europea.

En 1961, Vizcaya, Guipúzcoa y Alava ocupaban los lugares primero, segundo y cuarto en PIB por habitante. En 1993 los puestos respectivos eran el 13º, 16º y 5º. Un informe del Parlamento Europeo de 1991 situaba a Euskadi entre las cuatro regiones industriales en declive con perspectivas de empeorar. Ese pronóstico no se ha verificado del todo. En los últimos cinco años, la economía vasca ha crecido el 9,8%, casi tres puntos más que la media española (7%) y la de la Unión Europea (7,3%). Con todo, según el estudio de la Fundación BBV presentado la semana pasada, la posición relativa del País Vasco ha pasado entre 1986 y 1996 del cuarto al quinto puesto en renta per cápita (y al sexto en renta familiar disponible). Entre 1975 y 1990 se perdieron en Vizcaya 100.000 empleos industriales, el 42% de los existentes. El Concierto económico ha permitido aminorar los efectos de la crisis industrial, pero el paro suponía a fines de 1995 el 23,6% de la población activa, ligeramente por encima de la media española, y era del 50% entre menores de 25 años y del 38% entre menores de 35.

El paro y la crisis económica son las dos primeras preocupaciones de los vascos, según una encuesta del Gobierno vasco de septiembre de 1995. La siguiente preocupación es el terrorismo, seguida por el sida, las drogas y la seguridad ciudadana. De un total de 15 posibilidades, las menos citadas son el «desarrollo del Estatuto» y el «logro de las aspiraciones de autogobierno». En fin, ETA asesinó con anterioridad a la muerte de Franco a 43 personas y desde entonces a otras 761, hiriendo a 1.904. También ha secuestrado a 46 personas, obteniendo un botín cifrado en unos 4.000 millones de pesetas.

Estos son algunos de los datos cuya lectura ayudará al biznieto del organista de Etxalar a entender mejor la situación del país que por primera vez visita como presidente del Gobierno.

© Copyright DIARIO EL PAIS, S.A. - Miguel Yuste 40, 28037 Madrid
digital@elpais.es | publicidad@elpais.es


Volver al comienzo

Volver