JOSÉ IGNACIO IZQUIERDO
JEFE DE FORMACIÓN DE ESIC
Licenciado en Gestión y Marketing por ESIC; master en dirección financiera y diversos cursos de especialización de Dirección y Gestión de Empresas. Director comercial de Artestilo.
Mientras cursaba estudios en ESIC, comencé a trabajar como comercial en la empresa familiar. A los dos años, puse en marcha una empresa de distribución y logística comercial, en la cual sigo desarrollando parte de las funciones y responsabilidades de la dirección comercial. Desde el año 1991 colaboro con Esic-Empresa como profesor en el área comercial. Posteriormente, empecé coordinando cursos de larga duración y tutorizando prácticas. Más adelante, pasé a diseñar y coordinar programas formativos de muy distinto carácter. En la actualidad ocupo la posición de Jefe de Proyectos, fundamentalmente en dos líneas diferentes: de una parte, formación ocupacional y, de otra, formación continua.
Cabe distinguir el desarrollo de mi actividad en función de las dos distintas líneas comentadas anteriormente. En la formación continua, mis funciones y responsabilidades van desde el análisis de las necesidades formativas, desarrollo de diagnóstico y análisis previo para la adecuación de los programas, hasta la puesta en marcha de los mismos (documentación y casos ad hoc, cuadro de consultores-formadores, etc) y su posterior seguimiento y evaluación. En los programas de formación ocupacional, gran parte de la puesta a punto es realizada por las instituciones promotoras. Mis funciones se centran más en la coordinación, seguimiento y tutorización de los proyectos. Podría resumirse en la dirección de planes de formación-consultoría para pequeña y mediana empresa.
Creo que el cambio fundamental viene provocado por la necesidad de entender la formación en la empresa como un «todo», al contrario de la clásica concepción de la formación de forma puntual y aislada. Se trata de conseguir que las acciones o programas formativos tengan una aplicación real y a corto plazo, sin olvidar el largo plazo. Es fundamental concebir la capacitación profesional de manera secuencial y continua para lograr la mejora de la competitividad de la empresa españolal. Actualmente, se necesitan grandes profesionales y metodologías de formación-acción para lograr dar ese valor añadido necesario a la educación en la empresa.
El responsable de formación de una consultoría de formación debe conocer a fondo todas las áreas de la empresa, para así poder analizar y dar respuesta a las distintas carencias y necesidades que se puedan detectar. A su vez son obligadas la capacidad de negociación y de gestión de equipos de trabajo. En lo que a formación se refiere, sería deseable una licenciatura universitaria en el área empresarial, una experiencia directa de responsabilidad en la empresa y un reciclaje constante en formación continua.
Aquí habría que matizar las diferentes vertientes: la empresa de tamaño mediano y grande y las pequeñas empresas. Con respecto a las primeras, son conocedoras de la importancia de este puesto de trabajo, aunque no en todas figure en su organigrama. El segundo grupo, las pequeñas empresas, conocen la importancia de la formación en términos generales, no siendo posible en muchos casos designar un puesto de trabajo dentro de la misma. No obstante, la formación continua se soluciona en gran parte gracias a los programas que tanto la Administración Pública como otras instituciones, asociaciones, etc, proporcionan para cubrir esta carencia.
TINA PAYÁN RUBIO
JEFE DE FORMACIÓN DE HERTZ
Relaciones públicas por la escuela Limber's y master en Recursos Humanos y Organización de Empresa por la Escuela Superior de Gestión Comercial y Marketing; he realizado numerosos cursos y seminarios complementarios tanto en el Reino Unido como en España, de management, técnicos, formación de formadores, habilidades directivas, y ciclos especiales para jefes de formación.
Mi trayectoria profesional se desarrolla desde sus comienzos en la rama del turismo (servicios). Conozco el mundo hotelero a través de mi primer trabajo en la recepción de un prestigioso hotel. Poco más tarde me incorporé como responsable de transfers y reservas al touroperador inglés «Thomson Touroperations». En 1991 comencé en el departamento de operaciones de Hertz para pasar meses más tarde a ocuparme del departamento de formación hasta la actualidad.
Hertz, dentro del sector de alquiler de coches, tiene la responsabilidad no sólo de mantener, sino mejorar continuamente sus estándares de calidad, como compañía líder. Nuestros profesionales son la clave para que esto se cumpla.
Ciertamente, el papel ha cambiado mucho. El «rol» actual tiene una mayor relevancia. Actualmente la formación se planifica, se presupuesta, se estudian los métodos y seleccionan los mejores, pero, sobre todo, se evalúan los resultados. En definitiva, supone uno de los mejores transmisores oficiales de la filosofía de la empresa.
Un elefante por lo receptivo de sus orejas (según diría el estimado profesor J. Ucero), un zorro por su intuición, un perro por su capacidad de comunicación, un gato por su tenacidad y paciencia, y un camaleón por su capacidad de adaptarse al medio y al momento. Todas estas cualidades las podría encarnar una persona con una gran dosis de profesionalidad, combinando con una sólida experiencia de empresa y conocimiento del negocio y, por último, una formación académica orientada hacia el área de la psicología y/o resultados humanos.
Pienso que cada vez más las empresas son conscientes de la importancia de la formación como motor de cambio. En España, Hertz, comienza a apreciar los beneficios de la formación planificada y adecuada a unas necesidades específicas. Si el objetivo de las empresas es alcanzar el máximo grado de profesionalidad, competitividad y la más óptima motivación del individuo-empleado e individuo-persona, resulta difícil imaginar una filosofía de empresa donde la formación no sea uno de sus pilares básicos. Para los grandes directivos de empresa, el gancho está en los resultados. Afortunadamente el avance que está experimentando la empresa española hace meditar positivamente a la gran mayoría de ellos o ellas.
ABC, 14 de junio de 1996