El País Digital
Jueves 
27 julio 
2000 - Nº 1546
 
CULTURA
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Nicole Kidman rebaja su caché para rodar con Amenábar y su "talento originalísimo" 

La actriz australiana deja en Madrid su estela de estrella lista, muy profesional y muy guapa 

MIGUEL MORA, Madrid 
Ya se entiende el porqué de esa sonrisa permanente y mirífica en los labios de Tom Cruise. Salvando las distancias, es la cara que se le pone a cualquiera al ver a su señora, Nicole Kidman, una flaca lista, llena de fragilidad aparente y de encanto. Ayer convirtió en fans a unos 200 periodistas. La semana que viene empieza a rodar Los otros con un Alejandro Amenábar entregado a sus talentos. Entre elogios mutuos y miradas de cierto arrobo, la estrella de Hollywood resumió así su admiración por el cineasta: "Un talento originalísimo para crear suspense, y no le da miedo enseñar lo oscuro".
 
Kidman flanqueada por Cruise y Amenábar, 
ayer, en la presentación de la película Los otros
(G. Lejarcegi).
Risueña, relajada, muy alta y muy delgada, la piel como de porcelana blanca, los ojos azul intenso, el pelo rojo claro y lleno de bucles, la nariz fina y respingona, la boquita de piñón, un traje estampado cursi como un repollo con lazos... ¿Una muñeca? No, señor. Nicole Kidman, actriz australiana nacida en Hawai, 33 años, esposa de Tom Cruise, madre de dos hijos adoptados, intérprete de una decena de películas olvidables y de otra (Eyes wide shut, de Kubrick) que suscitó división de opiniones.
 
 

Kidman es ya una superestrella en Hollywood. Suele cobrar unos 1.700 millones de pesetas por película. Esta vez, según contó ayer el director de Los otros, la actriz ha aceptado rebajar su sueldo. Los productores no quisieron dar la cifra exacta. Así Kidman es ahora simplemente Grace, trágica protagonista de este filme español de misterio y terror que Amenábar, autor del guión y de la música, rodará durante las próximas 12 semanas en Madrid y en Cantabria.
 
 

Los ensayos han comenzado hace unos días. Kidman está encantada, en plena faena, "tratando de encontrar el corazón" al personaje, averiguando quién es, qué siente, "sin juzgar su moralidad". Amenábar, también. Ha escrito su película "más intimista", un guiño a sus miedos infantiles (los armarios, los pasillos oscuros, los pasos que resuenan...), y no habrá efectos especiales, ni buenos y malos, sino matices: "La estrella es el personaje".
 
 

El director se confiesa fascinado por su actriz. Cuando la conoció en Nueva York se quedó deslumbrado por la fuerza de sus ojos. "Y eso es lo que trataré de potenciar. Ella es perfecta para el papel, y no sólo por su físico ni por su nombre, sino por la complejidad que da a sus personajes".
 
 

Alguien pregunta por el retraso del rodaje. Amenábar permanece tranquilo, ajeno a los 3.500 millones de pesetas de presupuesto. Explica que la tardanza ha producido ventajas ("es el guión que más he trabajado") y un inconveniente: la molestia de tener que trabajar solo en una tarea que, por definición, se comparte con los actores.
 
 

Kidman justifica con todo detalle su retraso. Estaba rodando Moulin Rouge, un musical, en Australia: se alargó siete meses, se cayó y tuvo que operarse una rodilla. Luego, ante una pregunta tombolera, aclara que no ha venido de vacaciones, precisamente, sino fascinada por la posibilidad de rodar un guión "soberbio", "que incluye el mejor personaje femenino que he leído en mucho tiempo".
 
 

La rueda de prensa transcurre fluida, amable, un poco sosa. Kidman está entregada, sin fisuras. Incluso comprende, muy bien, que Amenábar prefiera rodar en España: "Soy australiana y respeto mucho esa fidelidad a su equipo, a la industria de su país, a su productor. Es muy fácil caer en el reclamo de Hollywood y Alejandro no lo ha hecho. Así que yo he tenido que venir una temporada y me encanta. Podremos conocer el país mejor que de turistas y quizá los niños aprendan español. El cine es contar historias, da igual dónde. Y está muy bien hacer películas grandes, pero también es muy enriquecedor hacerlas pequeñas". 

Y Tom Cruise llegó a la hora de la foto

M. M, Madrid 
El acto de ayer fue uno de esos espectaculares pistoletazos de promoción a la americana, con efecto final incluido. Tom Cruise, que al parecer había llegado el lunes a Madrid más o menos de incógnito (aunque se tropezó con la prensa deportiva que esperaba al futbolista Figo en el aeropuerto), apareció en plena sesión de fotos de Kidman y Amenábar. No lo hizo en la rueda de prensa anterior, con lo cual se evitó el acoso de los micrófonos y se limitó a enseñar esos dientes que derriten corazones.
 
 

La pequeña estrategia de mercadotecnia (la foto con el actor más taquillero del mundo vale -y cuesta- por lo menos cinco veces más que si él no está) es sólo un síntoma más de que Los otros / The others es un producto español muy diferente a otros, que se apoya en los más clásicos recursos promocionales del star system de Hollywood.
 
 

En origen, producen la película Las Producciones del Escorpión (José Luis Cuerda) y Sogecine (Fernando Bovaira), que son los que efectivamente ponen el dinero, y la distribuye Canal+. Cuando Cruise leyó el guión que los productores españoles enviaron a Kidman, decidió sumarse al proyecto como productor ejecutivo (una figura que ayuda y controla pero no financia).
 
 

A través de su compañía Cruise/Wagner Productions, sociedad del actor y Paula Wagner, Cruise compartirá trabajo con su socia (que también adapta con Amenábar el guión al inglés) y los hermanos Bob y Harvey Weinstein.
 
 

Lanzamiento en EE UU
 
 

Hay otro dato que da idea de lo ambicioso que es el proyecto: la todopoderosa Miramax ha adquirido los derechos de exhibición de The others en lengua inglesa, lo cual garantiza, en principio, su gran lanzamiento en Estados Unidos, y permite adivinar que el objetivo final de la tercera película de Amenábar, que cuenta con un reparto de brillantes actores británicos y se rodará en inglés, es el Oscar. Miramax distribuyó en todo el mundo, con el éxito conocido, La vida es bella, de Roberto Benigni.
 
 

Seguramente en homenaje a su fiel descubridor, José Luis Cuerda, el joven director no descartó ayer hacer su próxima película en español, "y rodarla, por ejemplo, en Albacete".
 
 

Según recordó Fernando Bovaira, responsable de Sogecine, Cruise, que había comprado los derechos de Abre los ojos para hacer el remake, decidió también "apadrinar" el lanzamiento de Los otros.
 
 

La actriz Nicole Kidman aclaró que, mientras dure el rodaje, Cruise estará "yendo y viniendo". Parece que la pareja está harta ya del asedio de los paparazzi al chalé de la lujosa urbanización de La Moraleja, asi que es muy probable que cambien de residencia. Kidman ha prometido que tratará de aprovechar estos días para ponerse al día en el cine español. 
 

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