La Legión vigila desde ayer la línea fronteriza de Ceuta 

ROCÍO ABAD, Ceuta 
Un batallón de legionarios vigila desde ayer los ocho kilómetros del perímetro fronterizo que separan Ceuta de Marruecos. La presencia militar se ha incrementado debido a que los 300 agentes de la Guardia Civil que custodian la línea se han visto desbordados ante la cantidad de inmigrantes que intenta cruzar clandestinamente la frontera terrestre que delimita el territorio español.
 
 

Hasta ahora, las unidades del Ejército tenían la misión de disuadir a los inmigrantes en su intento de saltar la valla de tres metros de alto, aunque no podían detenerlos sino solamente avisar a la Guardia Civil. Ahora, los militares de tropa colaborarán en la seguridad del perímetro, sinuoso y de difícil cierre total, en el que se han instalado cámaras térmicas, sensores de movimiento y dos torretas.
 
 

El blindaje definitivo del perímetro -con muros metálicos de 3,20 metros de alto con alambradas en su parte superior- ya se ha iniciado, aunque la rectificación del proyecto original costará al Estado 2.500 millones más, lo que elevará lo invertido para este concepto en Ceuta desde 1991 a 8.000 millones. En la actualidad, hay más de 2.000 africanos alojados en el campamento de Calamocarro mientras el flujo de entrada de sin papeles no cesa.