MERCEDES HERRANZ, Madrid
Adolfo Lozano, argentino y perteneciente a la segunda generación de una familia de emigrantes españoles. Economista, profesor universitario y estudioso de la emigración gallega, de su arquitectura popular y de las costumbres .... Cree que es imposible saber el número de españoles residentes en Argentina pues muchos «llegaron al país sin papeles». Se enorgullece de su colección de 60.000 diapositivas sobre Galicia. Lozano participó en Lisboa en el congreso Españoles de ambas orillas organizado por Sociedad Estatal Lisboa 98.

Pregunta. ¿Cuál es la situación de los centros gallegos?

Respuesta. La situación es de depresión. No hay emigración desde la década de los 50 a los 60 y evidentemente la situación económica de Argentina está pasando por un momento de transformación. Hay paro que fundamentalmente afecta a los mayores de 60 años, edad que tiene muchos de los emigrantes españoles.

¿Se diferencia la situación de los españoles a la de los argentinos?

No, todos viven el mismo drama.

¿Pese a todo no hay casi retorno?

La gente no tiene dinero ni para pagar el pasaje. El retorno se puede realizar, sólo, si se tiene la certeza de que se va a vivir bien y adaptados.

¿Que vinculación tienen los españoles de Argentina con España?

En algunos casos a través de los centros. En otros ni siquiera eso, porque las cifras y estadísticas nos hablan de una población que cotiza en determinados centros, y aunque las cotizaciones son muy bajas -lo que hace que los centros languidezcan- hay gente que no puede cotizar. Lo que significa que haya más gente fuera de los centros que en éstos.

¿A qué se debe su participación en el congreso de Españoles de ambas orillas?

Conocí la realización del congreso a través de un consejero de la emigración, Castelao Bragaña. Yo doy la cátedra de cultura de Galicia en una universidad privada, tengo cerca de 200 alumnos. Es una asignatura no curricular, en la que la mayoría de los alumnos son profesionales por lo general hijos de gallegos.

Su ponencia es sobre centros gallegos.

Efectivamente. No todos los gallegos estuvieron asociados. La historia de la emigración es una historia muy dura como para ser encasillada en los centros. Lo que habría que hacer sería un trabajo de campo, de archivo de la palabra para recabar la vida, las vicisitudes y para poder tener una idea de la emigración. Siempre digo una frase «ningún español puede tener conciencia de la emigración si no va a los países americanos donde esa emigración se produjo. Y, ningún hijo de emigrante podrá entender lo que significa la emigración sino va a conocer la aldea de su padre». Es el cierre de dos culturas.

¿Cómo ve el futuro de los centros gallegos?

Evidentemente los centros gallegos tienden en el largo plazo a languidecer o desaparecer si no se reforman. Una buena solución a los centros sería crear hogares de día en los que se fomentasen actividades para mayores, eso, tendría un bajo coste y tendría una buena función social. Por lo demás, el futuro de los centros sólo se podrá resolver si lo enfocamos hacia un segmento intermedio (personas de mediana edad), aunque a los ancianos hay que mantenerlos y, por supuesto, a los jóvenes hay que difundirles la cultura (campamentos, cursos...).

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